Redacción 20 octubre Fuente de la imagen, Getty Images Una declaración de atracción sexual. Una mano que reposa sobre una rodilla. Un mensaje de texto coqueto. Si viene de la persona correcta en el momento adecuado, puede hacerte sentir muy bien. Pero de una persona equivocada y en un momento no apropiado, un mensaje de flirteo descoloca y una caricia no deseada puede causar incomodidad, ofender o avergonzar.

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Abecé de foto, Las agresiones ocurrían en la intimidad de la pareja, entretanto que de cara a la academia parecía una relación normal. Ira fue mi primera mujer. Nos conocimos cuando teníamos veintipocos años. Ella dio el primer paso y me invitó a salir. Mis padres me habían antedicho que yo tenía que mudarme enseguida después de que empezara a salir con alguien. En otras palabras, debutar una relación significaba renunciar a la familia y a tener un límite sobre mi cabeza. En un fecha tenía que perderlo todo.